Aída
presenta tramas protagonizadas por un grupo de familiares y vecinos
de un barrio marginal que tienen que enfrentarse a los avatares de
una vida que no les trata del todo bien. Pero detrás de los
avatares de este grupo de pillos- y muy, muy en el fondo con buen
corazón- se encuentra un punto de vista irónico y lleno de humor.
Deudas, denuncias, hijos gamberros en la edad más difícil, una
madre detestable, y un hermano medio delincuente… la vida de Aída
es muy dura. El punto de partida de Aída es la muerte del padre de
la protagonista. Ella recibe la noticia en el Casi ké no y marcha
rápidamente al tanatorio donde se encuentra el cuerpo del difunto.
Allí conoce la noticia en boca de su madre: su padre le ha dejado en
herencia la casa familiar. Lo
que en principio se presenta como una oportunidad para vivir más
desahogadamente se convierte –una vez más- en un problema. Su
madre, una mujer rencorosa que siempre ha visto a Aída como una
fracasada y con la que nunca tuvo una buena relación, vive en la
casa heredada. Aída regresa al entorno de su infancia, a barrio
donde se rió, y allí se reencuentra con sus familiares, amigos y no
tan amigos. Sin embargo, no cuenta con que este reencuentro será el
principio de su nueva vida.
Una
familia caótica, una pareja recién casados, una Bridget Jones
española, el ‘pesado oficial’ del vecindario, dos prejubilados,
un antisocial, una mileurista, un galán de telenovela, dos okupas y
un matrimonio con niños, son algunos de lso personajes de La
que se avecina,
que relata en clave de humos las aventuras, conflictos y problemas
cotidianos a los que se enfrentan los habitantes y trabajadores de un
edificio de nueva creación.
El
escenario de esta disparatada comedia es un inmueble situado en la
periferia de una gran ciudad que consta de un total de diez viviendas
y de un local comercial, en el que se ha abierto una peluquería. Las
situaciones habituales que se viven en cualquier comunidad de
vecinos, como los problemas típicos de la urbanización de nueva
creación, como la mala calidad de los materiales y acabados de las
viviendas; y la complejidad del ámbito inmobiliario, marcado por el
boom que vive actualmente el sector en España, la escalada de
precios y difícil acceso de los jóvenes a la vivienda, la
especulación y los problemas derivados de las hipotecas, son
parodiados en la serie.
En
una sociedad en la que las reservas de petróleo están casi agotadas
y los gobiernos han restringido las libertades con el supuesto
objetivo de garantizar la paz y la seguridad a la población, Daniel
(Aitor Luna), un joven idealista que milita en un movimiento
revolucionario denominado La Resistencia, termina encarcelado por
enfrentarse al sistema en La Torre, una plataforma petrolífera
situada en alta mar reconvertida en prisión de máxima
seguridad.
Dispuesta a todo para sacarlo de allí, Anna (María Valverde), su mujer, obtiene una plaza en el Cuerpo de Funcionarios de Prisiones y consigue un destino en La Torre. Allí contactará con Daniel y junto a otros militantes de la Resistencia pondrá en práctica un plan de fuga extremadamente arriesgado en el que ha trabajado durante los cinco años en los que su marido ha estado encerrado. A lo largo de su peripecia encontrarán todo tipo de imprevistos que ralentizarán el plan, sufrirán accidentes que pondrán en grave riesgo sus vidas y se enfrentarán a numerosos peligros, pero contarán con grandes armas para afrontar este reto: su esperanza en el futuro y el gran amor que se profesan.
Dispuesta a todo para sacarlo de allí, Anna (María Valverde), su mujer, obtiene una plaza en el Cuerpo de Funcionarios de Prisiones y consigue un destino en La Torre. Allí contactará con Daniel y junto a otros militantes de la Resistencia pondrá en práctica un plan de fuga extremadamente arriesgado en el que ha trabajado durante los cinco años en los que su marido ha estado encerrado. A lo largo de su peripecia encontrarán todo tipo de imprevistos que ralentizarán el plan, sufrirán accidentes que pondrán en grave riesgo sus vidas y se enfrentarán a numerosos peligros, pero contarán con grandes armas para afrontar este reto: su esperanza en el futuro y el gran amor que se profesan.
Esta
serie trata de las relacione profesionales y personales de un grupo
de médicos de un equipo de urgencias de un hospital. Los miembros de
un equipo de urgencias luchan por salvar vidas mientras intentan
poner en orden sus sentimientos. Ésta es la premisa en la que se
basa la serie Hospital
central.
Junto a las tramas personales de sus protagonistas, la serie abarca
casos médicos de máxima actualidad y que más han impactado a la
opinión pública. Se plantearán casos habituales en los Servicios
de Urgencia de los hospitales como la importancia de la donación de
órganos, la sobredosis por drogas de diseño, la violencia
doméstica, el alcoholismo, la inseguridad ciudadana, y también
enfermedades poco conocidas por el público como el Síndrome de
Turner, la achalasia o la Porfirio aguda intermitente.
Asimismo, Hospital
central
busca la espectacularidad de las escenas exteriores realizadas con
especialistas.
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